Un corte de energía eléctrica afecta desde hace más de 12 horas a los vecinos del paraje Entre Ríos en Lago Puelo, luego de que un álamo de gran porte cayera sobre el tendido eléctrico
Si bien el servicio fue restaurado en algunas zonas cercanas, los residentes del sector más afectado siguen esperando una solución.
La situación ha generado malestar y preocupación en la comunidad, ya que estos incidentes no son aislados. Gabriela, vecina del Camino Viejo, relató: «Estamos sin energía eléctrica desde hace 15 horas por la caída de un árbol en una zona donde cada vez que sopla viento sucede lo mismo. La caída fue en la Ruta 16, a metros de la rotonda maderera.»
La problemática radica en los álamos de gran altura y antigüedad, una especie típica utilizada como barrera contra el viento en las plantaciones de lúpulo. Sin embargo, su tamaño y ubicación representan un riesgo constante para viviendas, vehículos y personas.
Otro residente del conocido Camino de Ripio expresó su frustración: «Estamos cansados de reclamar para que se volteen los álamos. Hace más de siete años pedimos una solución. Estos árboles, de más de 40 metros, ponen en peligro nuestras casas cada vez que hay viento, pero el intendente no nos escucha. ¿Qué esperan, que pase una tragedia?»
La comunidad denuncia la falta de intervención por parte de las autoridades municipales y de los servicios públicos. Al tratarse de propiedad privada, no se pueden realizar podas sin la autorización del dueño del terreno, quien, según los vecinos, se niega a asumir los costos. Además, no existe una legislación que obligue a los propietarios a mantener sus árboles en condiciones seguras.
Los residentes urgen una solución antes de que se produzca un accidente grave, exigiendo que las autoridades implementen medidas preventivas y sanciones para los propietarios que desatiendan estos riesgos. La caída de este álamo no solo dejó a la zona sin energía, sino que también expuso una problemática de fondo que sigue sin resolverse.