El Bolsón: Peregrinación a la Virgen Misionera en Nahuelpán

El pasado 18 de enero se llevó a cabo la tradicional peregrinación anual a la virgen Misionera, patrona de Río Negro

La manifestación de fe tradicional, además de honrar a esta advocación, promueve los valores del encuentro, la esperanza y el compromiso entre quienes caminan y las comunidades.

Con el lema «Con María y Ceferino, comunidad en camino», la comunidad parroquial de El Bolsón y un grupo de feligreses de la diócesis de San Carlos de Bariloche, junto con misioneros de Buenos Aires y de San Juan, participaron el sábado 18 de enero de la peregrinación a la Virgen Misionera en Nahuelpan, entronizada al pie de la cascada.

Con la presencia del obispo diocesano, monseñor Juan Carlos Ares; la hermana Lucía Molinari, quien acompañó a los misioneros de San Juan y miembros de la comunidad parroquial de Nuestra Señora de Luján de El Bolsón, guiados por su párroco, presbítero José Lynch.

Monseñor Ares recordó la historia de esta advocación mariana: «Cuando la imagen de la Virgen Misionera de Río Negro, ciudad que en ese entonces pertenecía a la diócesis de Viedma, peregrinó a lo largo de toda la provincia, cerca de la cascada de Nahuel Pan fue recibida con tanto cariño por la comunidad mapuche Quimey Quipan, que hizo una réplica que quedó asentada cerquita de esta cascada».

Los peregrinos se dirigieron a pie y a caballo por el camino Los Nogales, para recorrer aproximadamente un kilómetro desde El Cruce hacia la cascada, rezando el rosario. En la oportunidad, el obispo bautizó a una niña llamada Lucía y luego celebró la Eucaristía.

 

LA VIRGEN MISIONERA DE RÍO NEGRO

A mediados de los sesenta, en las recientes provincias de Neuquén y Río Negro, con los nuevos aires del Concilio Vaticano II (1962-1965) llevaron a las diócesis sacerdotes, religiosos y religiosas que buscaron implementar la “opción por los pobres”, especialmente a partir de los obispados de Jaime De Nevares (1961-1991) y de Miguel Esteban Hesayne (1975-1993). Estos últimos formaron parte del clero que abrazó la teología de la liberación y luchó en defensa de los derechos humanos durante los años de dictadura militar.

En ese contexto, en 1978 el obispo Hesayne decidió crear un símbolo devocionario que estuviera más identificado con la región y que uniera a todos los fieles de las diversas parroquias rionegrinas. Tras una consulta con el presbiterio resolvió que la advocación se llamara “Virgen Misionera de Río Negro” y que debía peregrinar con el pueblo.

Junto a un grupo de colaboradores, buscó confeccionar una virgen mapuche y pobre para representar al pueblo rionegrino, y se la nombró patrona provincial, vinculada al paisano de la línea sur, un vecino chileno

Para dar inicio a la devoción se organizó una primera peregrinación por toda la provincia, en donde la imagen recorrió unos 5.500 kilómetros sobre el auto del obispo junto con los párrocos de las distintas ciudades rionegrinas y fieles de cada lugar.

Un año después, el 12 de octubre de 1979, la Virgen fue entronizada en la capilla de la Colonia de San Juan de General Conesa, donde se realizó la peregrinación hasta el pequeño santuario elegido para la Virgen Misionera situado a la vera de la Ruta Nacional Nº 250, a 16 km de la ciudad.

El proyecto de crear una imagen mariana que representara, de alguna manera, a la Iglesia rionegrina surgió a partir de la experiencia misional y el recorrido territorial del obispo por toda la diócesis, que coincidía, en ese momento, con los límites políticos y administrativos de la provincia de Río Negro.

A partir de ese momento el obispo pensó que esa idea se podía materializar con una imagen mariana. Decidió compartir esta iniciativa con los sacerdotes que iba encontrando en las visitas parroquiales y lo que surgió como una idea se fue “conformando en un proyecto de viaje misionero mariano para el año 1978”, durante esta experiencia pascual de misión donde salió el nombre de la imagen. Según Hesayne, la propuesta provino de un párroco de Valcheta, Jesús Alegría, quien comentó que podría llamarse “Virgen Misionera de Río Negro”.

La imagen terrenal de la Virgen, comprometida con su pueblo y su historia, es retomada por Hesayne en su “Carta a los agentes pastorales sobre la Virgen Misionera y a los fieles”. Allí el obispo describe a la Virgen Misionera como “una mujer conocedora de la situación de su pueblo y desde la óptica de fe en la nueva realidad programa su vida relacional con su pueblo”.

“la Virgen misionera de Río Negro se ha de constituir en un lugar de encuentro con la gente con su liberación, con su salvación integral”, vinculando a esta figura la idea de protección y salvación del pueblo rionegrino

El “viaje misionero mariano” fue organizado por el Obispado Hesayne junto a los párrocos y feligreses de la provincia. La imagen recorrió 5.500 km desde el 28 de noviembre al 20 de diciembre de 1978, pasando por las diferentes parroquias de la provincia.

El Paso de la Virgen Misionera por la provincia, en el 1978, en nuestra región tuvo lugar el 13 de diciembre de 1978. Antes, a las 11 de mañana había estado en Villegas y El Manso, y por la tarde, en esta comunidad de la Reserva Nahuelpan, estuvo la imagen de la Virgen Misionera, entronización que se llevó a cabo en 1987.

 

Contemplando la imagen de la Virgen Misionera

La Virgen lleva vestido y velo azul: El azul es considerado el más profundo de los colores por eso simboliza la fuerza de las personas, su hondura, su capacidad de reflexión.
Simboliza la transparencia de la verdad como un cristal o un vidrio limpios y las promesas cumplidas, las palabras que uno da y de las cuales no se retracta.
Implica sinceridad.
Significa aquello que nos sobrepasa en comprensión y no se puede aferrar con definiciones: como el aire, el mar, el agua.
Es el color de enlace de lo profundo con lo alto, de lo humano con lo eterno. La túnica recuerda la intimidad de la persona.
Intimidad que debe ser resguardada sin falsos secretismos pero cuidada con sencillez. La persona humana tiene derecho a su intimidad que es inviolable.
El velo que cubre la cabeza, recuerda que sobre la persona humana existe otro más grande: Dios.
Es signo de vida que se ordena desde lo que Dios quiere, desde la voluntad de Dios: Hágase en mi según tu Voluntad».

 

@Limite42

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Aɴɢᴇʟ Dᴀɴɪᴇʟ Mᴏʀᴀʟᴇs Periodista Independiente DIRECTOR EDITORIAL Diario Digital de El Bolsón – Río Negro – Patagonia Argentina | Eɴ ᴛɪᴇᴍᴘᴏs ᴅᴇ ᴇɴɢᴀɴ̃ᴏ ᴜɴɪᴠᴇʀsᴀʟ ʟᴀ ᴠᴇʀᴅᴀᴅ ᴇs ʀᴇᴠᴏʟᴜᴄɪᴏɴᴀʀɪᴀ

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