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Se volvió a desplomar el valor de los bonos soberanos tras el mensaje de Luis Caputo, y el riesgo país llegó los niveles que tenía a inicios de junio.
La conferencia de prensa que ofreció el viernes pasado el ministro de Economía, Luis Caputo, impactó de lleno en el valor de los bonos de deuda soberana en dólares, que volvió a bajar aunque de manera más moderada que en jornadas anteriores. Esa variación produjo que el riesgo país toque un máximo de casi cuatro semanas.
En la city porteña sugirieron que «el mercado esperaba el viernes otro tipo de noticias, y las que se anunciaron tuvieron gusto a poco», según sondeó el sitio Ámbito Financiero, por lo que «las primeras reacciones de estos últimos días fueron un dólar superando los $1.400 y los bonos cayendo entre los dos días más del 1,5%».
El lunes de esta semana se reunieron los bancos con las autoridades financieras pero la cita «no fue del todo buena», porque no cayó nada bien el contexto y la iniciativa de pasar la deuda del Banco Central al Tesoro, lo que, en última instancia, obligaría a los contribuyentes a afrontar esos pagos.
Un dato no menor sobre el pase de la deuda del Banco Central al Tesoro es que que la recaudación de impuestos cayó 14% en términos reales en junio, con $ 11.300 millones, cuando se recaudaron $ 13.400 millones de mayo.
Mientras tanto, el bono soberano que más cayó fue el Global 2029, con un -3,6%; seguido por el Bonar 2038 (-2%); y el Global 2041 (-1,5%), y durante la primera parte de la rueda, llegaron a ceder hasta 5,1%.
Como resultado, el riesgo país llegó a registrar un pico intradiario de 1.570 y para el final de la jornada financiera quedó en 1.536, su número máximo desde el 7 de junio pasado.
El ministro de Economía, Luis Caputo y el presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Santiago Bausili, se reunieron el lunes de esta semana con los representantes de los bancos para avanzar en la instrumentación del traspaso de los pasivos monetarios al Tesoro.
La medida del gobierno de Javier Milei, que busca sanear las cuentas de la autoridad monetaria implicará una profundización del ajuste o bien la emisión de nueva deuda para que el Tesoro puede hacer frente a unos pasivos que no le pertenecían y que el Central cubría con emisión monetaria.
Al encuentro acudieron al Banco Central Eduardo Elsztain, titular de IRSA y accionista mayoritario del Banco Hipotecario, y Juan Cuattromo, presidente del Banco Provincia.
