EL HOYO | INDIGNACIÓN SOCIAL
Delegación de Bosques con asiento en la localidad de El Hoyo, se confirmó intervención con actuaciones que incluyeron inspección ocular y relevamiento de pruebas, en un hecho de tala rasa sin autorización de más de 350 entre cipreses y coihues, dentro de superficie de la Reserva Forestal Puerto Patriada a lo que se suman unos 30 ejemplares más dentro de su propiedad. La desaprensiva acción fue llevada adelante por un conocido empresario turístico del sector.
Tomado estado publico dicho accionar, las imágenes de los arboles volteados comenzaron a circular por las redes sociales, con comentarios y descargos de vecinos y vecinas expresando su indignación e impotencia, por tratarse de árboles nativos, malestar más que entendible comunidad aun sensible y afectada por la catástrofe ígnea que provocó un daño e impacto socio ambiental invaluable.
Las actuaciones en terreno, estuvieron encabezadas por personal de la delegación de bosques a cargo de Rafael Railef y comisión policial de la comisaría local. Al arribar al lugar, se encontraron con 353 árboles nativos volteados dentro de la Reserva Forestal y unos 32 en la propiedad privada, y una gran quema de los residuos forestales producto de la tala; además se corroboró que varios de los arboles (Rollizos) volteados de la reserva se encontraban apilados dentro de la propiedad del infractor.
Railef confirmó las actuaciones realizadas, que incluyen imágenes y datos relevados en el lugar, dicho proceso administrativo será elevado en las próximas horas y quedará a la espera de la aplicación de las multas contempladas en el decreto 764/04 anexo I XII Penalidades de la secretaria de bosques de la provincia del Chubut , bajo el correspondiente apercibimiento judicial. También se procedió a incautar el material.
Según la información de NdlC, durante la intervención de la autoridad de bosques provincial el hombre propietario, de un importante complejo turístico lindante con la Reserva Forestal Puerto Patriada, escudó su accionar bajo la hipótesis propia de que dichos ejemplares nativos significaban un alto riesgo de incendio, por lo que, por motus propio, decidió realizar la tala rasa en una amplia faja, de unos 20 metros de ancho, entre el límite del campo de su propiedad y la reserva forestal Puerto Patriada.
Indignación e impotencia: “Cada árbol que volteo es una puñalada al planeta”
Entre las diversas expresiones vertidas en las redes sociales por vecinos de la región señalaron: “Esto pasa en El Hoyo sector Rincón de Lobos, gran empresario talando bosques de ciprés y coihue en la reserva y cruzando la madera a su campito mientras otros ponen la vida en riesgo tratando de salvar nuestros bosques, vecinos y brigadistas se la jugaron este año. Cada árbol que volteo es una puñalada a nuestro planeta y todos nosotros. Mientras algunos salimos a juntar semillas para reforestar y todos los años plantamos algún ciprés, este señor cree que vive en una burbuja .Todo nuestro apoyo a la denuncia de bosques ojala aprenda no es la primera vez y ojala la justicia haga su trabajo”.