PERSONAL EN ALERTA Y MOVILIZACIÓN
Trabajadores de enfermería del hospital rural de El Hoyo se declararon en estado de alerta y movilización reclamando “una sala de cuidados especiales para atender a pacientes contagiados con Covid”.
El delegado gremial, Ricardo Amat, explicó la situación vivida el domingo “cuando ingresó una paciente que tuvo que ser internada en una sala común, ya que desde el hospital subzonal El Maitén no quisieron recibirla y el hospital zonal de Esquel nunca contestó el pedido de derivación”.
Amat señala que “este centro asistencial no está preparado para atender demandas de este tipo. En el marco de los protocolos establecidos por la pandemia mundial de coronavirus, desde marzo del año pasado venimos haciendo reclamos a la dirección del hospital y al propio Ministerio de Salud para contar con una sala de aislamiento, como tienen casi todos los nosocomios de la provincia, para no contaminar el resto de las instalaciones. Sin embargo, jamás tuvimos una respuesta a nuestro petitorio”.
“Sabemos que esta crisis sanitaria tiende a profundizarse –agregó-. Este tipo de situaciones no debiera pasar y hay que tenerlas previstas: por un lado, hay una falta de inversión y ausencia del Estado; por otro lado, vemos que tampoco hay conducción en el hospital. En definitiva, los trabajadores nos encontramos totalmente desamparados y desatendidos”.
“Lo mismo está pasando con la comunidad, hoy no podemos garantizar la prestación de salud pública a los vecinos de El Hoyo. De igual modo, si se contamina el hospital, no podemos atender otras patologías, ya que no podemos mezclar a esos pacientes con casos de Covid”, expresó el gremialista.
En concreto, reclamó “la urgente capacitación de los recursos humanos y las decisiones políticas y sanitarias suficientes para enfrentar la coyuntura”.
Apuntó además “a la necesidad de contar con guardias activas, porque a partir de las 14 el único que queda en el hospital es el enfermero, quien debe recibir a todos los pacientes y es quien también recibe los cachetazos y los insultos. De igual modo, en este momento estamos atendiendo solo con cuatro médicos, ya que hay dos aislados”.
En relación a versiones que circulan sobre la situación de colapso del hospital de esa localidad chubutense, el director Febo Sosa, desmintió que el nosocomio “esté colapsado y contaminado con Covid”.
El médico reconoció la falta de infraestructura “para contar con una sala especial de aislamiento para pacientes positivos”, al tiempo que explicó la situación vivida el fin de semana con la paciente internada unas 10 horas en una sala común y que posteriormente recibió el alta médica.
Según detalló, la mujer “se encontraba aislada en su domicilio y debió ser trasladada al hospital por una complicación. Desde la guardia se intentó derivarla al hospital subzonal de El Maitén, que no pudo recibirla por encontrarse con personal aislado y funcionando con mínima cantidad de recursos humanos; mientras que desde el hospital de Esquel no siquiera nos respondieron el llamado telefónico en la madrugada del domingo”.
El último parte oficial epidemiológico publicado por el hospital rural El Hoyo dio cuenta de 27 casos positivos, con 50 contactos estrechos aislados. Con una población de unos ocho mil habitantes, Sosa confirmó que “ya se han vacunado unas 1400 personas con primera dosis y ya comenzamos con la segunda dosis. Estamos a la espera de una nueva partida anunciada por el ministro de Salud, Fabián Puratich”.
Con todo, Sosa señaló que “por supuesto nos preocupa la realidad sanitaria de la zona; las complicaciones en las derivaciones –tanto a El Maitén como a Esquel-, es algo que nos pasa seguido y no podemos negar. Es un problema que tienen los hospitales rurales en su conjunto”.
Asimismo, precisó que “nuestro hospital está en condiciones de atender normalmente. Si bien ha pasado un año de pandemia, todavía no podemos contar con una sala de cuidados especiales porque no tenemos la infraestructura necesaria”.
Fuente Jornada