Al agente policial se le atribuye la muerte de Juan Carlos Villa y herir al hijo, disponiéndose la detención domiciliaria. Para la fiscalía, “es de la extrema complejidad” el legajo
La situación que ha sacudido a la comunidad de El Bolsón, especialmente a Mallín Ahogado. El agente policial fue formalmente acusado por la muerte de Juan Carlos Villa y por herir gravemente a su hijo durante un operativo de allanamiento. La justicia enfrenta un caso de alta complejidad que involucra la actuación de un miembro de las fuerzas del orden en circunstancias que aún son objeto de debate.
El Incidente Fatal
El trágico suceso tuvo lugar el pasado 11 de agosto a las 15:30 horas en Callejón Inalef, Paraje Mallín Ahogado. Seis agentes policiales, con una orden judicial en mano, llegaron al lugar con la intención de realizar un allanamiento, secuestrar elementos y detener a uno de los propietarios del domicilio. Durante el operativo, se desató un enfrentamiento que terminó con la muerte de Juan Carlos Villa y con su hijo gravemente herido.
Según el relato de la Fiscalía, el hombre que debía ser detenido intentó huir al percatarse de la presencia policial. Fue perseguido por el agente imputado, quien logró alcanzarlo y reducirlo en el suelo. En ese momento, el padre del detenido, armado con un cuchillo, se abalanzó sobre el policía, quien, en un intento por defenderse, disparó su arma reglamentaria a corta distancia. Los disparos resultaron fatales para el hombre, que murió en el lugar debido a una hemorragia masiva causada por un shock hipovolémico.
Instantes después, el agente volvió a disparar, esta vez al joven que se había reincorporado para enfrentarlo. La bala impactó en su neumotórax derecho, provocándole una lesión grave.
La Complejidad del Caso
La audiencia inicial, en la que se formularon los cargos contra el policía involucrado, estuvo marcada por la consideración de la extrema complejidad del caso. La Fiscalía destacó que, si bien el agente estaba cumpliendo una orden judicial, la investigación debe profundizarse para determinar si las acciones tomadas en el momento fueron justificadas.
El fiscal a cargo subrayó la necesidad de reunir más evidencias, que incluyen entrevistas, certificados médicos y un análisis exhaustivo de la escena del crimen, llevada a cabo por el Gabinete de Criminalística. La defensa del imputado, por su parte, argumentó que el agente actuó en defensa propia, ya que su vida estuvo en riesgo al ser atacado por las víctimas.
Decisión Judicial
Finalmente, el juez a cargo de la audiencia consideró legítima la formulación de cargos y aprobó las medidas cautelares solicitadas por las partes. El agente deberá ser trasladado a la ciudad de General Roca, donde deberá fijar domicilio y estará bajo vigilancia mediante un dispositivo de control satelital. Además, se le prohibió acercarse y contactar a las víctimas y testigos.
El desarrollo del caso será seguido de cerca, dado que plantea interrogantes cruciales sobre los límites del uso de la fuerza por parte de la policía y la aplicación de la legítima defensa en el marco de operaciones judiciales.
Cabe señalar que el gobernador de Río Negro se pronunció a través de la red social “X”, enfatizando al señalar “que el policía actuó en legítima defensa” ante un “peligro extremo para su vida”, lo que derivó en el fatal desenlace. Además, el mandatario subrayó su decisión de brindar “todo el respaldo legal necesario al efectivo involucrado, ordenando al Ministerio de Seguridad y Justicia y a la Policía de Río Negro que aseguren su protección”.
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